Nos unimos en una sola voz aclamando a Dios para pedir a favor de otros y uno mismo, siendo así un río de bendiciones de parte de Jesús. (Mt 18, 19-20).
Así mismo valorar la importancia de interceder para llevar a cabo el plan perfecto de Dios para nuestra vida.
Cuando oramos no buscamos nuestro propio interés sino el de los demás (Flp 2, 4), sobre todo dándole la alabanza y la gloria a nuestro Señor. Oramos conforme a la voluntad del Señor por todas las necesidades de la Comunidad, nuestras iglesia, la sociedad y el mundo, ya que en estos tiempos existe una gran urgencia de orar unos por otros.
¿Cómo lo hacemos?
Como lo haría Jesús. (Jn 17)
Movidos por el Espíritu Santo.
Características que debe tener un intercesor.
• Vive en el Amor Cristiano. (1 Jn 4, 7)
• Busca la humildad. (Si 3, 17-24). Como intercesor dejamos de ser nosotros mismos y reconociendo que todo lo que tenemos es obra del Señor.
• Busca tener una comunión con Dios (Lc 2, 37). Nos agrada mucho orar en todo momento y a estar en gracia con el Señor.
• Lucha por lograr una vida continua de Conversión dispuesto a una vida radical cuando estamos en pecado y reconociendo nuestras debilidades y dejando nuestro mal camino.
• Es dócil al Espíritu Santo. (Rm 8, 26). Es el Espíritu Santo quien nos inspira y guía.
• Busca el don de perdonar como el Señor lo hace.(Mt 5, 23-24.44)
• Tener mucha fe. “Creer aunque no veas y no sientas, es tener fe”.
• Orar conforme a la voluntad de Dios.
• Que sea perseverante. (Ef 6, 13.18). Orar constantemente. (1 Ts 5, 17)
• Que sea prudente.
Integrantes del ministerio:
